Foto: Comité Paralímpico Español
El lanzador de jabalina valenciano Héctor Cabrera, deportista de la Cátedra Divina Pastora de Deporte Adaptado y que compite en la clase F12-F13 de discapacitados visuales, logró la medalla de bronce en la sexta jornada del Mundial de atletismo adaptado celebrado en Londres, registrando su mejor marca de la temporada, 61,53 metros.
Cabrera, quinto en los Juegos Paralímpicos de Río, se quedó solo por detrás de Uzbeko Schvenikow, que registró récord del mundo (71.01 m), y del iraní Nikparast, que quedó en segundo puesto con 61,88 m. “Sabíamos que Uzbeko era inalcanzable, sabemos que es un chaval con unas condiciones increíbles, una proyección enorme y era muy difícil, por lo menos hoy en día, llegar a esa distancia que ha llegado él”, cuenta Cabrera.
“Después del año tan complicado que hemos tenido, la verdad que no era nada fácil llegar en las condiciones que llegamos, la medalla sabe más oro que a bronce”, cuenta Cabrera. Después de los Juegos de Río, Cabrera fue operado en noviembre de 2016 de una hernia discal que le impidió reaparecer hasta estos últimos tres-cuatro meses. “Nunca hubiéramos pensado llegar con tan buenas condiciones al campeonato. Si cuando me operaron hubiéramos tenido que firmar un lanzamiento por encima de 57 metros… hubiéramos firmado”, asegura.
Ahora, su próximo objetivo son los Europeos de Berlín. El deportista valenciano trabajará para llegar en las mejores condiciones e intentar batir el récord del mundo de su categoría (superar la barrera de los 64 metros), además de intentar revalidar su título de Campeón del Mundo de 2014.